De pequeño, a Wataru lo abandonaron en un bosque y lo acogió una bruja de más de cien años. Desde aquel día, la bruja y su gato, Hotaru, se convierten en su familia. Para no olvidar nunca los preciados momentos que pasan juntos, Wataru decide anotar los sucesos del día a día en memorandos.
Con el tiempo, el niño crece y, sin darse cuenta, el afecto que siente por la bruja se convierte en amor.
¡Empieza una historia de amor fantástica entre un humano y una bruja!